Año 5, Número 10, octubre 2024 - marzo 2025 / Revista Idiomática
Las artes escénicas como estrategia en la enseñanza de lenguas extranjeras
“Crear el conocimiento, el entendimiento
que posibilita la convivencia humana, es
el mayor, más urgente, más grandioso y
más difícil desafío que enfrenta la
humanidad en el presente”
Maturana y Varela
El arte ha ido de la mano del desarrollo humano y no es extraño que encontremos las distintas aplicaciones del arte en disciplinas como la terapia psicológica o la docencia. Así, el uso de las herramientas teatrales en el proceso de enseñanza-aprendizaje se ha convertido en una estrategia fundamental que cada vez cobra más importancia en las instancias educativas.
En el caso de la enseñanza de lenguas extranjeras, el arte teatral puede dotar de diversas estrategias, ya que no basta con tener una vocación pedagógica, sino de desarrollar herramientas que fortalezcan la labor docente.
El arte teatral definido como “ [...] el arte de la representación, es la vivencia creativa de roles distintos a nuestra identidad propia.” (González, 2007) incluye en su formación actoral la “profesionalización” o afinación de acciones cotidianas relacionadas con los sentidos como: escuchar, hablar, caminar y respirar correctamente. En el caso de la docencia, al estar frente a un grupo, la analogía con estar en un escenario es más que evidente; sin embargo, en el caso de la docencia, aunque no tiene como objetivo representar a un personaje, si puede valerse de algunos aspectos de la formación actoral como las antes mencionadas, ya que se trata de habilidades que enriquecen el proceso de enseñanza-aprendizaje. “El aprendizaje en general, y el de lenguas en particular, es fruto de la interrelación entre las aptitudes, los intereses y el mundo que nos rodea. La persona que aprende construye sus propias estructuras mentales en función de sus necesidades, motivaciones y vivencias.” (González, 2007).
Encontramos también que el acontecimiento escénico se define como un convivio “El convivio, manifestación de la cultura viviente, distingue al teatro del cine, la televisión y la radio en tanto exige la presencia aurática, de cuerpo presente, de los artistas en reunión con los técnicos y los espectadores, a la manera del ancestral banquete o simposio” (Dubatti, 2007) por lo que en el aula, la relación cordial y armónica que se produzca entre los involucrados puede propiciar el ambiente emocional óptimo para que el proceso de enseñanza-aprendizaje se concrete en un conocimiento más consolidados a partir de vivir la experiencia en grupo y no de manera aislada y pasiva. “El aprendizaje de lenguas extranjeras es una tarea global entre el sujeto y los agentes de su entorno. En esta perspectiva, Morin (2003) nos recuerda la problemática de la enseñanza a la hora de articular unos saberes con los otros. Sostiene que las capacidades de contextualizar y de integrar son cualidades fundamentales de la mente humana que hacen falta desarrollar, y no desaprovechar” (González, 2007).
Considerando la importancia de las emociones y las habilidades que podrían contribuir a la enseñanza de lenguas extranjeras, expondremos en los dos siguientes apartados algunas de las habilidades tanto físicas como cognitivas que podrían contribuir en el aula.
Herramientas físicas específicas
El manejo de la voz es fundamental en el ejercicio docente, sin embargo, la mayoría de las escuelas en donde se prepara a futuros profesores no cuentan con una asignatura que se enfoque en desarrollar una técnica vocal que permita la proyección de la voz sin lastimar sus cuerdas vocales, sabemos que el ejercicio docente requiere de impartir varias clases al día, por lo que es importante la enseñanza en el cuidado de la voz del docente. No sólo se trata de hablar con un volumen alto, sino del aprendizaje de una técnica de respiración que permita enfrentar los retos de impartir las clases sin someter al docente al cansancio de garganta. Otros aspectos a considerar en cuanto a la voz se refiere, son la dicción y el ritmo del habla, sobre todo, cuando se trata de brindar dinamismo en explicaciones muy extensas que podrían resultar monótonas y/o cansadas “Por ejemplo, una aceleración de la velocidad (especialmente en un registro tonal alto), acompañada de un aumento de la intensidad, pueden ser indicios de enfado o de impaciencia; por el contrario, una velocidad lenta (especialmente en un registro bajo) puede transmitir tristeza.” (Cortés, 2002).
El manejo del espacio dentro del aula también puede ser entendido como el manejo de un escenario, aunque en una aula tenemos la ventaja de un mayor desplazamiento manteniendo cercanía con los alumnos y rompiendo la cuarta pared1; esta posibilidad de trasladarnos dentro del salón de clases ofrece la posibilidad además de escuchar directamente a los alumnos y generar mayor confianza a la hora de expresar alguna duda e inquietud sobre la clase. En este sentido se involucran también dos aspectos: la kinesis y la proxemia, los cuales determinan la distancia que se debe considerar al acercarse a los alumnos sin que se convierta en un acto invasivo o violento. Por otra parte, la kinesis se refiere al movimiento natural de nuestro cuerpo y el espacio que ocupamos; por poner un ejemplo, hay alumnos que tienen imposibilidad de mantenerse sentados en una silla durante más de 10 minutos, su kinesis está expresada en una necesidad de mantener su cuerpo en constante movimiento, lo cual puede obedecer a múltiples razones. No ahondaremos en el origen de esa necesidad; sin embargo, esa kinesis de un alumno, puede determinar las formas de trabajo con el grupo o con el alumno en particular, que tal vez requiera de actividades más dinámicas que le permitan integrar su kinesis a su proceso de enseñanza-aprendizaje. “De los atributos que nos asignamos se pueden establecer relaciones no lineales entre intelecto, emoción y cuerpo, y de su unidad podrá aparecer el espacio para un crecimiento como seres humanos respetuosos con sus semejantes y con el entorno.” (Adame y Yepes, 2017, p.70)
Otro factor determinante para el ejercicio docente son las microexpresiones que se generan (algunas veces) de manera inconsciente, pero que también proyectan información sobre nuestras reacciones: cruzar los brazos, levantar las cejas o torcer los labios pueden ser microexpresiones que se interpretan de manera negativa, incluso reprobatoria ante un comentario; habrá otras microexpresiones que tengan una connotación positiva como una sonrisa o abrir los ojos más que de costumbre en señal de sorpresa. Todos estos gestos que muchas veces pasan desapercibidos, también nos brindan información sobre la comunicación que establecemos dentro de un aula.
Para ahondar más en estos temas, hacemos dos recomendaciones: el libro Comunicación no verbal de Flora Davis (2010) y la serie estadounidense Lie to me (2009) en la que un especialista analiza los gestos y expresión corporal de personas de la vida pública.
Cabe mencionar que hay programas de nivel medio superior y superior que comienzan a atender la importancia de incluir en sus programas algunas asignaturas específicas en la enseñanza de estas herramientas, tal es el caso del Instituto Tecnológico de Monterrey que cuenta en sus programas de bachillerato bicultural con la asignatura de Desempeño Escénico como parte complementaria de la asignatura de Comunicación y Arte.
Herramientas cognitivas específicas
En los últimos años se ha identificado una relación mucho más profunda entre las ciencias neurológicas en los procesos de aprendizaje; estos estudios han determinado, entre otras cosas, que las emociones son fundamentales para un aprendizaje efectivo. El doctor en Ciencias de la Educación Rafael Bisquera Alzina explica que: “ se podría decir que la emoción dirige nuestra atención que, a su vez, permite una mejor focalización para adquirir y consolidar los aprendizajes en la memoria.” (Bisquera, 2019). Mientras que la neuropsicoeducadora Gabriela Martin explica en una entrevista de la Asociación Educar la importancia de gestionar las emociones dentro del aula para un aprendizaje efectivo: “El entorno educativo es importantísimo porque los alumnos están en su proceso de desarrollo. Si bien la familia es la principal fuente de desarrollo socioemocional desde que nacen, la escuela también juega un papel crucial. Ayuda a los alumnos tanto en lo académico como en la convivencia, por lo que es fundamental que los docentes estemos preparados para acompañarlos en este desarrollo.” (Martin, 2023).
Todos en algún momento podemos recordar una clase en la que aconteció una situación en donde se manifestó alguna emoción ya sea por parte de un profesor o de un compañero, esto nos refiere la necesidad de una educación más humana que permita a los alumnos y docentes mostrarse vulnerables ante ciertas circunstancias que acontecen en el aula. Según el Doctor Bisquerra, se puede hacer la siguiente clasificación de las emociones que favorecen o dificultan el aprendizaje:
La imaginación, la creatividad y la estrategia2 son tres elementos que se pueden fomentar con un proceso artístico. “Las artes enseñan a los niños que los problemas reales suelen tener más de una solución posible, que es necesario analizar las tareas desde diferentes perspectivas, que la imaginación es una poderosa guía en los procesos de resolución o que no siempre existen reglas definidas cuando tienen que tomar decisiones (Eisner, 2004).
Las disciplinas artísticas aportan diversas habilidades dentro del proceso de enseñanza-aprendizaje para propiciar un pensamiento más profundo; aunque cada una de ellas detona diferentes talentos, en el caso del teatro, al igual que la danza, se involucran cuerpo y mente lo que permite activar zonas del cerebro distintas a las que se activan en un proceso artístico distinto como pintar, esculpir, componer música, etc.
Al respecto, el psicólogo Michael Posner identificó las siguientes evidencias:
La música se procesa en la corteza auditiva que está en el lóbulo temporal.
Las artes que conllevan movimiento como el baile o el teatro activan la corteza motora.
Las artes visuales como la pintura se procesan principalmente en los lóbulos occipital y temporal
La poesía o la prosa implican a las áreas de Broca y Wernicke relacionadas con el procesamiento lingüístico (Posner et al., 2008).
Figura1 Posner et al. (2008) |
El ejercicio docente demanda en todo momento que se integren estos tres elementos (la imaginación, la creatividad y la estrategia), ya que desde la planificación de una clase hasta su ejecución frente a grupo es necesario considerar el dinamismo con la que se llevará a cabo, sobre todo pensando en el proceso y el resultado que se espera; por ejemplo, en una sesión en la que se tiene como objetivo enseñar los verbos de alguna lengua extranjera, se puede proponer un juego de roles en el que los alumnos realicen las acciones de los verbos en pequeñas escenas en donde se deba decir el verbo conjugado con distintos personajes, de esta manera los alumnos construyen una serie de anécdotas que les permitan comprender esos verbos, integrando en el proceso de enseñanza aprendizaje tanto su cuerpo como la cognición y las emociones que puedan generar ese ejercicio. “Por otra parte, hoy sabemos que los mismos circuitos neurales que se activan al realizar una acción también lo hacen al observar a otra persona haciéndola. Estas neuronas espejo posibilitan la imitación, una poderosa forma de aprendizaje.” (Guillen, 2024).
Conclusiones
Es importante incluir asignaturas artísticas en cualquier proceso de enseñanza- aprendizaje, sin embargo, como podemos observar, en el caso de la enseñanza de lenguas extranjeras es fundamental integrar los recursos creativos que brinda la disciplina teatral en favor de un aprendizaje dinámico, creativo y consolidado.
A partir de un estudio realizado por el Doctor en educación James Catterall se detectaron algunos efectos del teatro dentro de las aulas. Se mencionan como los más representativos los siguientes:
Concluimos que es fundamental y urgente planificar programas de estudio que no fragmenten el conocimiento; por el contrario que se faciliten y promuevan propuestas con un contenido integral que posibilite un proceso de enseñanza-aprendizaje de lenguas extranjeras enriquecido con distintas áreas donde docentes y alumnos se conviertan en investigadores permanentes sobre sus habilidades transformando el simple conocimiento en un conocimiento vivo. “[...] lo reduccionista de la formación disciplinaria y de lo pernicioso de separar Sujeto y Objeto pues según la formación como teatristas, la realidad artística quedaba aparte de la que vivíamos cotidianamente. En esta experiencia, en cambio, se trataba de algo muy diferente: crear, conocer, comprender, actuar y transformar formaban parte de una misma realidad.” (Adame y Yepes, 2017, p.22).
Referencias
Adame Domingo y A. Yepes (2017) Conocimiento en vivo. Una experiencia desde la transdisciplinariedad. Xalapa: Litográfica veracruzana.
Bisquerra, Rafael y Mateo Andrés (2019) Competencias emocionales para un cambio de paradigma en educación. Barcelona: Horsori Editorial.
Cortés Moreno, M. (2002). Didáctica de la prosodia del español: la acentuación y la entonación. Madrid: Edinumen.
Davis, Flora (2010) Comunicación no verbal, Ciudad de Madrid: Alianza Editorial.
Eisner, Eliot W. (2004). El arte y la creación de la mente: El papel de las artes visuales en la transformación de la conciencia. Barcelona: Paidós.
González P. Montserrat.(2012) El teatro como estrategia didáctica. Universidad de Barcelona.
Maturana, Humberto (1990), Emociones y lenguaje en educación y política. Santiago de Chile: Hachette.
—- —- y Francisco Varela (2003) El árbol del conocimiento: Las bases biológicas del entendimiento humano. Buenos Aires: Lumen.
Posner, M. et al. (2008): “How arts training influences cognition”, en Learning, arts and the brain: the Dana Consortium on arts and cognition. Danna Press.
Referencias web
Guillén, Jesús (2024) ¿Por qué el cerebro humano necesita el arte?. CEDE. link
Martin, G., y Moreira Merlo, E. (2023). Episodio 7: Inteligencia Emocional y Mindfulness en el Aula. Aprende con AE - Asociación Educar para el Desarrollo Humano. link
Notas
1 Término que se refiere a una cuarta estructura invisible que separa a los actores del área de butacas
2 Para ahondar en el tema de imaginación teatral, se recomienda el trabajo desarrollado por la Mtra. Denisse Zuñiga Gómez.
Por Karina Castro Santana
malinali07@gmail.com
Maestra en Artes Escénicas por la Universidad Veracruzana, licenciada con mención honorífica en Literatura Dramática y Teatro por la UNAM, alumna especial en la Escuela Nacional de Antropología e Historia ENAH. Cuenta con un diplomado de postítulo en Fundamentos en Dramaterapia por la Universidad de Chile y con un certificado en neurobiología y plasticidad cerebral por la Asociación Educar, Argentina. Con 22 años de experiencia docente en distintas universidades. |